miércoles, 27 de mayo de 2009

De Un Caballero de Armadura Oxidada (2ª Parte)

Ayer mi filosofía del fracaso sufrió un liger fracaso, valga la rebuznancia. Yo, que siempre espero lo peor para así no decepcionarme, debo reconocer que tuve que mandar esa filosofía más allá de Cuenca.

Retractarme debo de algunas palabras y modificar dicho pensamiento: es cierto que mucha gente se va de nuestras vidas, en un continuo ciclo de conocer/aprender/olvidar, pero por suerte siempre hay de todo ese grupo alguna que se queda y que no se va ni con agua caliente...

Modestia aparte, siento decir al que no lo crea, que sí soy especial y según mi madre el más guapo del mundo. Y soy especial porque vosotros me hacéis así. No tengo que demostrar nada a nadie, soy lo que soy, con mis chistes malos (que no falten), mis pensamientos raros, mis charlas de biología (me he dado cuenta que si hablas de un tema, poniendo una cara muy seria,la gente te cree aunque no tengas ni idea de lo que estas hablando), mis altibajos y sobre todo porque siempre tengo un abrazo aquí pa el que lo kiera.

Tengo la suerte de tener amigos desde hace muuucho tiempo, y que algunos de esos amigos hayan conocido a personas especiales con las que han decidido compartir su vida, y que resulta que se han convertido en amigas mías, bueno cuñadas y compañeras de piso eventuales, y por eso me siento afortunado.

He conocido gente maravillosa, gente que me ha enseñado tantas cosas que por eso escribo esto aquí: gente que me ha enseñado ilusiones, decepciones, reír, llorar... Algunas se han ido sí, pero a los que os habéis quedado daros las gracias por estar conmigo, cuando estoy riendo y cuando no se puede estar a mi lado (porque es en esos momentos cuando más se os necesita), y es cierto lo que dijo aquel que la armadura hace más daño al que esta fuera, debido a un pisotón o algun golpe.

Ayer la filosofía que me da el fracaso fracasó... Vaya palo... Ojalá que todos los días me dieran estacazos como ese!!

Os quiero a todos y si alguno se va, por favor que cierre la puerta y que vuelva pronto, siempre tendrá su hueco en mi corazón.

lunes, 25 de mayo de 2009

De Un Caballero De Armadura Oxidada

Nunca he sido muy optimista la verdad, todo hay que reconocerlo, ya que desgracidamente las cosas no siempre salen como esperamos y por ello tengo la estúpida idea de esperar nada o poco y si sale algo bien me sorprendo gratamente. Bueno eso es en la teoría, porque en la práctica hasta el más desilusionado se hace ilusiones...

Esto me lleva a seguir la llamada "Filosofía que me da el fracaso", nombre robado a ese genio extremeño que es Roberto Iniesta cantante de Extremoduro.

Ayer me atrevi a entrar en mi cuarto y poner un poco de orden en ese caos ordenado que me caracteriza, y cual no fue mi sopresa al encontrar una vieja armadura polvorienta. Aunque he engordado ese tipo de armaduras tiene la particularidad de quedar siempre bien, no sé que poder extraño tienen pero es así. La coloqué sobre mi pecho y supe que de nuevo empezaba el ciclo. Nada me haría daño, ¡sería casi indestructible! Aunque es cierto que nada saldrá,pero es un precio que ahora mismo estoy dispuesto a pagar.

Siguiendo con la Filosofía que me da el fracaso, me di cuenta que tarde o termprano siempre la gente se va de mi vida, exceptuando unas excepciones que espero no se vayan nunca. La marcha siempre es la misma: un abrazo,alguna que otra lágrima, la promesa de que pronto nos veremos a ver y que todo seguirá como antes... Después, ves como esa persona se va de tu vida y sabes que de todo lo que te ha prometido, seguramente no se cumpla ni siquiera el diez por ciento. Puede que en los primeros días todo siga igual, un café rápido, una llamada de teléfono, un sms o un mail, pero a medida que pasa el tiempo me doy cuenta que soy fácil de olvidar, porque aunque yo recuerde gratamente a esa persona, ella no me recuerda a mí, y veo como su vida ha seguido adelante. No pretendo que nadie pare su vida por mí, no soy tan iluso, pero ese momento es triste....

Una vez escribi un cuento que decía que el amor al olvidarse viaja en forma de sueño hacia el corazón de otra persona y espera a que por fin lo encontremos de nuevo... Aunque crea eso no dejo de sonreir melancólicamente...

Entonces prosigue el ciclo: conocer a una persona, aprender todo lo que te enseña y desgraciadamente olvidarla... También en esta parte se dicen muchas mentiras: nunca te olvidaré ya lo verás, pero un día te levantas vas al baño, te vistes, desayunas y comienza tu día y cuando estás de vuelta te das cuenta que esa persona se ha ido, y que tristemente la has olvidado, que todo lo que hiciste por esa persona no ha servido de nada, y que el ciclo se ha completado...

No se puede decir que haya marcado a mucha gente,no se puede decir que sea alguien especial, salvo para aquellos que me han hecho así... No soy ni el más guapo ni el más fuerte, ni el más gracioso ni el más simpatico... No soy un gran escritor ni un Viejo Cuentacuentos... Soy yo simplemente... Un tipo que piensa demasiado,escribiendo cosas como esta que cada vez lee menos gente, y de los pocos que lo leen son menos los que se paran a pensar un poco... No quiero que me tachen de amargado,porque no lo soy, porque cada día me levanto (a veces demasaido tarde la verdad), con la idea de arrancar una sonrisa a alguien, y cada día me acuesto con la satisfacción de haberlo conseguido.

No dejare que la puta angustia me atrape otra vez, os lo aseguro, ni me autocompadeceré esperando un abrazo que para mi no sirve de nada, ya que esos abrazos deben guardarse para cuando de verdad lo necesites, no para cesos momentos en que eres sólo un alfeñique sin cojones para seguir...

Nunca he sido demasiado optimista la verdad, todo hay que reconocerlo, pero como siempre sois vosotras mis amigas las palabras, las que me enseñáis a decir lo que siento.

sábado, 23 de mayo de 2009

De La Cuarta Fase del Dolor

Abrió los ojos sintiéndo como su pupila se encogía con dolor ante la luz. La bilis llenaba su boca, una boca que no habían besado en años, y su lengua era incapaz de saborear nada que no tuviera alcohol...

Se incorporó como pudo.Lo último que recordaba era que la noche anterior había bebido hasta reventar,intentando construir una máscara sonriente que ocultara el odio que sentía por si mismo y la rabia que le causaba ello. Recordaba que las cervezas venían una detrás de otra, sin saber de dónde y él las cogía sin preguntar, tragándolas sin saborearlas, deseando engañar y dormir su mente, deseando al menos poder dormir al menos una noche sin pensar....

Deseaba lavarse la cara, deseaba refrescar su frente ardiendo por un febril estado etílico, pero eso significaba tener que soportar su mirada en el espejo y no se sentía capaz...

Cómo había llegado a ese punto, al punto de que el miedo invadiera su mente,al punto de sentir que no tenía nada, de haber perdido todos y cada uno de sus sueños, de las ganas de luchar, de estar a un paso de tocar fondo... Caminó pesadamente de nuevo hacia su cama, donde más que recostarse, cayó como un saco de arena, intentndo dormir, pero aquellos pensamientos que habia intentado ocultar con el alcohol en represalia llenaron su mente haciendo que su cerebro golpeara su craneo deseando salir....

Agarró su cabeza,aprentando los dientes, encogido sobre sí mismo, sabiendo que pronto todo terminaría, sabiendo que pronto sería libre...

jueves, 21 de mayo de 2009

De Un Pequeño Cuento

Érase que se era...

... una ilusión que se rompía dando paso a una realidad que siempre estuvo ahí...

Un tipo que sonreía melancólicamente, intentado disimular su dolor...

Dos niños rubios y sonrientes que nunca llegaron a nacer...

Una derrota más...